Molina González

Estilo: Americana/Folk Rock/Country

Molina González es un old-timer, un trovador incansable y excepcional guitarrista con un corazón que late al ritmo de los viejos blues de los campos de algodón de los estados de la antigua confederación, que busca cada día un sonido más añejo y recio. Incansable en su búsqueda de viejos artistas desconocidos como Cisco Houston, Blind Lemon Jefferson, Dick Justice y otros no tan desconocidos como Son House, Robert Johnson o Hank Williams. Molina González retocede un siglo para recuperar estilos como el ragtime, country-blues, hokum y delta blues
Su nombre no deja lugar a dudas sobre su procedencia. Ni Molina ni González son apellidos corrientes entre los bluesmen, por más que el aumento de la población de origen hispano en los Estados Unidos los hagan cada día más posibles. Y aunque hay que admitir que tanto uno como otro -los apellidos- están presentes en la historia del rock y del folk rock norteamericano (Con Speedy Gonzalez el segundo; con el del malogrado líder de Songs: Ohia, Jason Molina, el primero), en su caso Molina González es español y de ascendencia española. Al menos si nos atenemos a los fríos datos que figuran en su partida de nacimiento, pero, ¿quiénes somos los demás para arrebatarle su sueño a nadie? ¿Qué clase de insensibilidad poseemos para discutir o incluso negar la personalísima identidad que hace latir un corazón entre los campos de algodón y la cordillera de los Apalaches? De modo que, efectivamente, podemos decir sin temor a equivocarnos o a falsear la realidad que Molina González es un auténtico old-timer, un genuino trovador de los que viajan en trenes de mercancías hasta que lo descubren y los botan. Profundo conocedor del blues primigenio, del country polvoriento de los caminos, del rock de alta graduación y del más añejo folk, también es un guitarrista excepcional, hábil y brillante. Y con una imagen que no desentonaría en una postal de una vieja granja de Kentucky, se dedica a rastrear a los más antiguos pioneros del blues ancestral, a Son House, a Robert Johnson, a Hank Williams, pero también al gran Blind Lemon Jefferson, a Dick Justice, a Cisco Houston, para desempolvar viejo ragtime, country-blues, hokum y delta blues y reavivarlo como recién salido de una barrelhouse.